Mi paso por las olimpíadas de Filosofía...

Me quedé en Santa Fe, instancia provincial, y aunque sí, me sentí mal al principio, porque lógicamente quería seguir avanzando, me quedo con la experiencia y los momentos lindos que viví. El mundo de la filosofía es increíble, y doy las gracias de haberla conocido y poder hacer con ella lo que siempre me gustó hacer, escribir. Por primera vez, después de cuatro años, logré "poner la cara" y dar a conocer lo que hago, ya que nunca me animaba a que la gente se entere que escribía, e incluso, estuve mucho tiempo publicando lo que escribía en forma anónima, me daba confianza que el lector de mis pensamientos e ideas no sepa quien era por nombre, o imagen física, sino que solo me conociera en forma virtual a través de un seudónimo. Me gustó eso de la tecnología, (ya que viene al tema de lo que escribí) me daba un anonimato que me hacia sentir segura para publicar lo que pensaba. Finalmente, me animé, participé, y por ser la primera vez que lo hago, siento que me superé a mi misma y dejé atrás mis miedos, de no animarme a mostrar lo que me gusta hacer.
Hago esta introducción para publicarles el ensayo que hice, el que me hizo presenciar tres instancias de estas olimpíadas, con las cuales, a todas las personas que me rodean, les quemé la cabeza...
Simplemente, me animo, una vez más a que conozcan mi forma de pensar, y acepto todo tipo de críticas. Y repito, aunque al principio estuve pesimista, de mal humor, y con ganas de llorar, estoy feliz por la experiencia que pude vivir. Con ustedes, mi ensayo, titulado: 

¿El hambre de poder, terminará por destruir al mundo? 


El objetivo de este ensayo es plantear cómo el hombre desperdicia los avances tecnológicos que descubre al estar enceguecido por el hambre de poder y la avaricia. A su vez, este ensayo filosófico presenta unas líneas de intervención para que cada ser humano pueda tomar conciencia y abrir los ojos para modificar y mejorar el mundo en el que habita.
El hombre es un ser de costumbre que quiere adaptarse al mundo, por eso utiliza a la ciencia y sus avances tecnológicos para así creer que obtiene poder. Actualmente vivimos en una sociedad muy extremista, hasta no llegar al límite, el ser humano se sigue abusando de la tecnología y con estas acciones se daña y daña con sus descubrimientos por no saber utilizarlos de la mejor manera.
Últimamente, la tecnología  nos rodea todo el tiempo, ya sea desde un celular, un televisor o incluso la heladera donde conservamos nuestros alimentos, y por qué no podríamos decir, que hasta los alimentos que compramos, son tecnología porque necesitan de algun proceso, que generalmente, se obtiene con tecnología para que al final llegue a nuestras casas.
Teniendo en cuenta lo mencionado en el párrafo anterior, surge un interrogante: ¿cómo llega a nuestros hogares esta tecnología? Sencillo, si les preguntara, cómo fue que llegó a sus manos, por ejemplo, un teléfono, todos me darían la misma y simple respuesta; “comprando, pagando para obtenerlo”.
Para obtener lo que el hombre quiere tiene que ganar dinero, y es tal esa ambición, que cada vez quiere más. Podría decir que en la naturaleza del ser humano está el “sentido” de querer superarse cada día más, lo que me parece increíble, debido a que  gracias a que un ser humano quiso superarse para conseguir más logros, contamos con infinidades de descubrimientos tecnológicos, e inventos; pero cuando esa superación se transforma en un hambre de poder continuo, el hombre pierde  la sensibilidad, y hace lo que sea por conseguir más poder, o ganar más dinero.
Con la expresión “hambre de poder” me refiero a que el hombre quiere ganar autoridad sobre los demás seres humanos, y se encuentra cegado por la avaricia. Elegí utilizar la palabra “hambre” porque, por ejemplo, cuando un animal tiene hambre se guía por instinto y hace lo que sea para conseguir alimentarse. Me resulta apropiado citar a Santiago Aysine, músico que expresa en una de sus canciones que "Sin nada en la heladera se nos llena de vació la razón" esta expresión, concuerda con lo expuesto en que es tal la ambición del hombre por obtener poder que deja de razonar.
A algunos seres humanos ya no les importa si tienen que sobrepasar a sus pares para lograr el bienestar y el progreso propios, y esto incide perjudicialmente, en el resto de la sociedad. A nuestro alrededor se observan personas indiferentes que generalmente obedecen  “la voluntad” de  un gobernante, que en la mayoría de los casos, es quien  perjudica a una  gran parte de la sociedad, por creerse fuerte y poderoso.
Norberto Bobbio, sostiene que “cuando empezó a organizarse la democracia, se hicieron promesas que no se cumplieron.” En la actualidad sucede lo mismo. Gobernantes que prometen y no cumplen, ganan poder por ejemplo, con un voto, pero al final perjudican a algunas de las personas que los apoyaron por dar falsas promesas y también hallamos a quienes dan cosas materiales o dinero a cambio de un voto, y el hombre en vez de guiarse por su moral, prefiere recibir algo material y brindarle poder a cualquier persona que lo quiera.
Desde siempre existió el hambre de poder, y se puede vivenciar en cada parte de nuestro planeta. Tal es el caso de las naciones que se preocupan por sí mismas, buscando sacar ventajas a cualquier precio; es tanto el hambre de poder que  tiene el ser humano que pierde hasta el sentido de humanidad. Sin ir más lejos, en Argentina, los diferentes golpes militares acaecidos en  nuestro país, son un claro ejemplo de que algunas personas sin las armas y la demagogia se sienten indefensas, por lo que terminan recurriendo a la violencia imponiendo el miedo a través del autoritarismo para obtener poder.
El hombre está utilizando la tecnología  sin medir las consecuencias, incluso deja aflorar ciertos espectros que vertiginosamente van cobrando vida: las armas, las  bombas nucleares, que fomentan la violencia, y demuestran que el mundo se está convirtiendo en una sociedad cada vez más  tenebrosa y fría.
 A pesar de esta realidad sombría, existen agrupaciones como por ejemplo, FUKAI, (expresión japonesa que significa el comienzo del cambio) que quieren rescatar el medio ambiente luchando contra la tala de árboles, la contaminación del agua, el aire; pero a su vez, obtienen los capitales para crecer y promocionar el cambio que quieren generar, de las mismas empresas contra las que dicen estar luchando. Esta paradoja es totalmente absurda, puesto que, se reciben capitales de quienes están dañando y devastando el medio ambiente. Se evidencia, por un lado, que el mundo en el que vivimos es cada vez más capitalista, y por el otro, se visualiza que a  la mayoría de la sociedad no le importa luchar contra la destrucción del medioambiente.
 Ahora bien, ¿los hombres, contamos  absolutamente  con todos los recursos para cuidar el medio ambiente? Y ¿podemos progresar a través de los distintos avances tecnológicos, utilizándolos para lograr cambios y mejoras que no perjudiquen nuestro universo? Con la ciencia conseguimos todo lo que necesitamos para  tener una sociedad libre, y lo que no estamos usando, es el primer recurso que tuvo el hombre desde su nacimiento: el poder de razonar.
Asimismo, nos encontramos frente a una sociedad cegada por el poder, el dinero, las grandes “figuras” del gobierno pretenden imponernos que si cada año no tenemos un televisor nuevo o un auto lujoso, somos  hombres fracasados, cuando en realidad, lo único que alcanzamos como resultado es la destrucción y desperdicio de algunos recursos naturales que podríamos utilizar y saber aprovechar para seguir mejorando. El mismo hombre creando tecnología, está agotando la mayoría de los recursos naturales, por lo que necesitamos poder complementar los avances de la “tecnociencia” (ciencia que se encarga del estudio e investigación de los avances tecnológicos así como también de su uso y aplicación en la sociedad) para poder salvar el medioambiente.
Por eso, el mundo necesita un cambio: que el hombre empiece a utilizar la “tecnociencia” para ganar mejoras en la tierra que habita y a su vez destruye. Creemos que estamos avanzando, cuando en realidad, lo único que estamos logrando es utilizar mal los recursos tecnológicos que se descubren.
Sin duda, con todo lo que la ciencia nos brinda, podemos ver que la sociedad está totalmente avanzada, el hombre tiene el poder de crear para bien, y lo está desperdiciando. Nosotros mismos, estamos agotando todos los recursos en muy poco tiempo, por lo tanto, cuando uno de nosotros quiera promover un cambio y logre que la sociedad entienda que estamos perjudicándonos, va a ser demasiado tarde para comprender que necesitamos accionar.
 Sin embargo, todavía estamos a tiempo de poder lograr un cambio radical. Tenemos que entender que la tecnología puede ayudarnos enormemente, pero hay que saber cómo usarla, cada hombre tiene el poder de ayudar a cambiar de a poco la sociedad.
Cuando cambiemos el punto de vista con el que miramos el progreso, vamos a ver, que lo que hacíamos no era tan correcto. El mundo está en una etapa de cambios constantemente, pero a esta altura, es donde debemos dejar de esperar que el cambio se produzca por sí solo para comenzar a actuar, y así dejar de ser una sociedad individualista y egoísta a la que no le importa el prójimo, y empecemos a ayudarnos entre todos, dejando de lado el hambre de poder,  porque sin dañarnos podemos obtener un mayor progreso y no económico sino humanístico.  De esta manera lograríamos ampliar nuestros horizontes y perspectivas tomando conciencia que no somos los “únicos” seres que habitamos el planeta tierra.
  Por último, si me preguntan ¿cómo lograría esta concientización? Diría que si cada uno empieza a cambiar mínimas cosas de la vida cotidiana, sin pensarlo se emanan energías de cambio a quienes nos rodean. Personalmente, empezaría por  concientizarme a mí misma, y así la sociedad comprendería que somos nosotros, con pequeñas acciones, quienes nos tenemos que salvar y construir un futuro mejor, evitando  la destrucción del mundo; en palabras de Albert Einstein: “El mundo es un lugar peligroso. No por causa de los que hacen el mal, sino por aquellos que no hacen nada por evitarlo.”


Comentarios

  1. muy bueno Paola! esta parte me encanta... El mundo está en una etapa de cambios constantemente, pero a esta altura, es donde debemos dejar de esperar que el cambio se produzca por sí solo para comenzar a actuar, y así dejar de ser una sociedad individualista y egoísta a la que no le importa el prójimo, y empecemos a ayudarnos entre todos, dejando de lado el hambre de poder, porque sin dañarnos podemos obtener un mayor progreso y no económico sino humanístico. Bueno te dejo un beso! y que sigan los éxitos!!!

    ResponderEliminar
  2. Me gusto la forma en que te informaste como elaboraste tu pensar y explicaste este tema con mucho tacto Paola! mucha razón en lo que mencionaste, el hombre es el único ser que se puede destruir a si mismo por el afán de querer cada vez mas y también por el uso inadecuado de la tecnología. Es verdad que no podemos esperar a que el cambio se produzca solo, hay que empezar actuando por uno mismo, y se que también es difícil a que la sociedad pase a pensar de forma grupal porque la mayoría cree que el individualismo es lo mejor, cuando al contrario, por lógica en conjunto se pueden obtener muchos mas resultados y mejores.. Yo creo que se puede producir ese cambio que muchos quieren, solo se necesita de alguna forma, llegar a la gente que comparten el mismo pensamiento y punto de vista para que el resto empiecen a reflexionar; ya sea desde un pequeño gesto de solidaridad, un saludo, de la música, arte, campañas caritativas,etc, es decir producir ese progreso humanístico que menciono koche en el comentario de arriba

    ResponderEliminar
  3. Es interesante como planteas el tema. Un tema que tocas es el uso de la tecnología y la técnica. En sí es algo muy util si consideramos que sirve y mejora los rendimientos para estudiar, para trabajar, para obtener mejores avances en la ciencia médica, un software de computadora funciona mucho más rápido hoy que hace 30 años, los que permite obtener muchos mejores resultados y más rápidos.
    Sin embargo en vez de que nosotros la dominemos (como decís vos para crear otros productos) ella es la que nos domina a nosotros. Se crean productos, (aunque ella en si misma también puede ser un producto como un celular por ejemplo) y esos productos no tienen todos las características de responder a necesidades básicas sino que son necesidades ficticias y creadas por el sistema. Vivimos en una sociedad de consumo donde se nos imponen ciertas pautas de consumo. La idea que nos es impuesta es adquirir todo el tiempo cosas, no importa que, no importa si no van a parar a satisfacer una necesidad de primer orden. Lo importante para el sistema económico actual es crear esas necesidades, hacerles ver al hombre que sin ella no pueden vivir.
    Lo que sucede entonces es que los objetos creados terminan imponiendoseles, lo vuelven su esclavo, al punto tal de que terminan modificando sus pautas de comportamiento, por ejemplo debe buscar trabajos mejores remunerados, no para vivir bien sino para adquirir mas objetos, cambia su visión sobre crear lazos solidarios entre los hombres, crea un punto de vista mas egoísta y competitivo, ya que ahora solo quiere hacer todo lo necesario para obtener no solo esos productos sino también competir con los que ya tienen esos mismos objetos. Olvida que por ejemplo las baterías de celulares que compramos poseen compuestos que son extraídos por manos de niños esclavos en Africa.

    ResponderEliminar
  4. Olvida que para obtener mas materia prima para fabricar sus productos esta destruyendo su propia habitat, con la consecuente posibilidad de que ni siquiera pueda tener un espacio habitable en el futuro.
    En resumen al cambiar la manera de ver que este tiene con respecto a lo que es necesario y lo que no, también cambia el.
    Actualmente el poder económico domina al político, por ejemplo estos productos son impuestos por la sociedad de consumo, sociedad que esta respaldada y sostenida en primer lugar por las corporaciones económicas actuales, (entiendo por corporación un gran numero de empresas que poseen el mismo dueño, o están bajo el nombre de la misma firma)
    Provienen de EE UU o europa en su mayoría, penetran en diversos países para "ofrecer sus productos" y son respaldadas por los gobiernos de sus respectivos países. Y no solo dominan a los gobiernos de los países en los que se instalan si no que ellas son las que dictan la dirección política y social en en sus naciones de origen.
    Proclaman políticas económicas neo liberales, es decir quieren que el mercado se rija por el libre juego de la oferta y la demanda, su punto mas fuerte es que las empresas compitiendo libremente entre sí, sin regulación externa alcanzan un equilibrio y un estado de bienestar social, pero eso nunca sucede, las empresas se comen una a otras, y una vez que eliminan la competencia ya sea haciendo la quebrar económicamente, o absorviendola, es decir comprándola. Una vez que esto sucede crean un monopolio, es decir venden sus productos al precio que quieren sin importarles nada de las personas ni de su proclamado "bienestar social" que la libre competencia traería. Los gobiernos del mundo en general no tienen las agallas necesarias para intervenir en esta situación, de intevenir el mercado, de regularlo para que las empresas (corporaciones) hagan lo que quieran. Generalmente o les tienen miedo por su inmenso poder económico internacional, o se juntan con ellos para obtener réditos.

    ResponderEliminar
  5. Este es un ejemplo de como lo económico domina al mundo. Sin embargo no lo notamos y creemos que es progreso, por que como decís vos Pao "Cuando cambiemos el punto de vista con el que miramos el progreso, vamos a ver, que lo que hacíamos no era tan correcto"
    Un beso amiga y a seguir tratando de entender como funcionan las cosas para que no compres el pescado podrido que te venden!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

El Principito.

Seguir la intuición.

La era de no amar...